Nada

Leo, escucho, veo...

Se quejan, maldicen, tiran piedras al empedrado, pero poco más.

Algunos, se dan cuenta de que creen más en superhéroes que en Dios.

Y los que creían en Dios, tiene preguntas para él, sin respuesta.

Otros, buscan consuelo en Fernando Fernán Gómez, y aquel mítico "a la mierda".

Si, era un caballero con mal carácter, os lo aseguro. Pero a una persona con Parkinson, si le pides un autógrafo, no le digas  "Intente no temblar que no se va a entender lo que escribe".

El FMI, nos recomienda, nos explica, nos exige ¿otro apretón?

Y no pasa nada.

Esta tarde, Mariano y Alfredo, firmarán su acuerdo. Habrá cámaras, foto y sello oficial para Europa.

La defensora del Pueblo, abre investigación sobre el impacto de la crisis en los hogares con niños y en la calidad de su alimentación. 

Y no pasa nada.

Príncipes y princesas, que ni son azules ni besan sapos. Conducta "no ejemplar".

Jueces que dictan sentencias poco después revocadas. Financieros facinerosos a la espera de condenas que nunca llegan. Millones que nadie encuentra.
Y no pasa nada.
Políticos, Sindicatos. En declive, en caída libre.
¿Y tu?
¿Y yo?
Remover conciencias, dejar los datos a un lado y buscar soluciones. 
Datos, información. ¿Para que?. 
Olvida lo que quieres, piensa en lo que necesitas. Lo que necesitan. Lo que necesitamos.

Leo a Cristina Fallarás, con ese estilo característico entre la ironía, el detalle máximo de descripción y un sabor intenso de novela negra.

Luego un día los periódicos y las televisiones hablan de hambre. Y a nadie se le inmuta el ganchillo. Tampoco. 

Si, Cristina, y no pasa nada. 

Sale el sol, para no variar. 
Siempre, después de llover, escampa.
Y no pasa nada.
Animo y suerte.