Estos días lluviosos forman parte de mi adicción.
Quiero decir, que hacen que cocinar se me amontone.
La 𝐌𝐚𝐫𝐫𝐚𝐧𝐚́ 𝐝𝐞 𝐩𝐮𝐥𝐩𝐨, el 𝐄𝐬𝐜𝐚𝐛𝐞𝐜𝐡𝐞 𝐝𝐞 𝐛𝐨𝐧𝐢𝐭𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐦𝐚𝐧𝐳𝐚𝐧𝐢𝐥𝐥𝐚, la 𝐄𝐬𝐜𝐚𝐥𝐢𝐯𝐚𝐝𝐚 con anchoas, los 3 litros de 𝐂𝐚𝐥𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐜𝐚𝐫𝐧𝐞, la 𝐂𝐫𝐞𝐦𝐚 𝐝𝐞 𝐜𝐚𝐥𝐚𝐛𝐚𝐜𝐢́𝐧 𝐜𝐨𝐧 𝐌𝐞𝐚𝐭 𝐌𝐚𝐬𝐚𝐥𝐚, los 𝐓𝐫𝐢𝐠𝐮𝐞𝐫𝐨𝐬 𝐚 𝐛𝐚𝐣𝐚 𝐭𝐞𝐦𝐩𝐞𝐫𝐚𝐭𝐮𝐫𝐚 y hoy, 𝐏𝐚𝐢𝐧 𝐝𝐞 𝐭𝐫𝐚𝐝𝐢𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐅𝐫𝐚𝐧𝐜̧𝐚𝐢𝐬𝐞 con masa madre.
También había pensado en una 𝐒𝐨𝐩𝐚 𝐝𝐞 𝐬𝐞𝐭𝐚𝐬.
Y llueve.
Natalia, con esa suave voz, canta apoyada en la barandilla.
Me mira y baila lánguidamente. Le diría que se pusiera algo en los pies, esta descalza sobre el suelo mojado de la terraza.
Lleva el pelo muy corto y, tal vez sea la luz, su piel es casi transparente. Como un fantasma.
*𝐸𝑠𝑡𝑎 ℎ𝑖𝑠𝑡𝑜𝑟𝑖𝑎 𝑡𝑒𝑟𝑚𝑖𝑛𝑜́, 𝑛𝑜 𝑒𝑥𝑖𝑠𝑡𝑒
𝐿𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑢𝑛 𝑑𝑖́𝑎 𝑐𝑜𝑛𝑠𝑡𝑟𝑢𝑖𝑚𝑜𝑠, 𝑠𝑒 ℎ𝑎 𝑒𝑠𝑓𝑢𝑚𝑎𝑑𝑜
𝑃𝑎𝑟𝑒𝑐𝑖𝑒𝑟𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠 𝑚𝑎́𝑠 𝑓𝑎́𝑐𝑖𝑙 𝑑𝑒𝑗𝑎𝑟𝑛𝑜𝑠
𝑃𝑒𝑟𝑜 𝑒𝑟𝑒𝑠 𝑢𝑛 𝑓𝑎𝑛𝑡𝑎𝑠𝑚𝑎 𝑐𝑜𝑛𝑚𝑖𝑔𝑜 𝑐𝑎𝑚𝑖𝑛𝑎𝑛𝑑𝑜
Las hojas del arce se mueven al ritmo de la música.
Un café más. Reviso la receta del pan.
𝑃𝑜𝑖𝑛𝑡𝑎𝑔𝑒, 𝑟𝑎̂𝑏𝑎𝑡, 𝑑𝑒́𝑡𝑒𝑛𝑡𝑒, 𝑓𝑎𝑐̧𝑜𝑛𝑛𝑎𝑔𝑒, 𝑎𝑝𝑝𝑟𝑒̂𝑡
Temperatura de base 66ºC. Estos franceses, son así.
Natalia, sonríe, se rodea con los brazos mirando al horizonte.
Creo que al final, pondré 𝐌𝐚𝐫𝐫𝐚𝐧𝐚́ 𝐝𝐞 𝐩𝐮𝐥𝐩𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐣𝐮𝐝𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬, de principal. Y de entrante, 𝐄𝐧𝐝𝐢𝐯𝐢𝐚𝐬 𝐜𝐨𝐧 𝐞𝐬𝐜𝐚𝐛𝐞𝐜𝐡𝐞 𝐝𝐞 𝐛𝐨𝐧𝐢𝐭𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐦𝐚𝐧𝐳𝐚𝐧𝐢𝐥𝐥𝐚.
Miro hacia la calle. Esto de ver fantasmas y escuchar voces...
¿Qué llevaba este último café?
Animo y suerte.
*𝖭𝖺𝗍𝖺𝗅𝗂𝖺 𝖫𝖺𝖿𝗈𝗎𝗋𝖼𝖺𝖽𝖾 - 𝖫𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝖼𝗈𝗇𝗌𝗍𝗋𝗎𝗂𝗆𝗈𝗌