Mientras Isi está a mis pies, escucho 𝗡𝗼𝘀𝘁𝗮𝗿𝗲́ de Bebe. Canta un desamor, o una ausencia, o cientos de ellas.
𝘈 𝘧𝘭𝘰𝘵𝘦𝘘𝘶𝘦 𝘥𝘦𝘫𝘢𝘯 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘭 𝘴𝘰𝘭 𝘭𝘦𝘴 𝘵𝘰𝘲𝘶𝘦
𝘠 𝘯𝘰 𝘴𝘦́ 𝘴𝘪 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘰 𝘪𝘳𝘮𝘦
𝘖 𝘮𝘦 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘰 𝘲𝘶𝘦𝘥𝘢𝘳
𝘓𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘦́ 𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘺𝘢 𝘯𝘰 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘰
𝘘𝘶𝘦 𝘮𝘦 𝘥𝘶𝘦𝘭𝘢 𝘮𝘢́𝘴, 𝘯𝘰
𝘈𝘴𝘪́ 𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳𝘦́
𝘓𝘢 𝘱𝘳𝘰́𝘹𝘪𝘮𝘢 𝘷𝘦𝘻, 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳𝘦́
𝘓𝘢 𝘱𝘳𝘰́𝘹𝘪𝘮𝘢 𝘷𝘦𝘻, 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳𝘦́
𝘓𝘢 𝘱𝘳𝘰́𝘹𝘪𝘮𝘢 𝘷𝘦𝘻, 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳𝘦́
𝘓𝘢 𝘱𝘳𝘰́𝘹𝘪𝘮𝘢 𝘷𝘦𝘻, 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳𝘦́
Me recuerda a 𝗜𝗱𝗲𝗮 𝗩𝗶𝗹𝗮𝗿𝗶𝗻̃𝗼, poeta uruguaya de la Generación del 45.
Por esas cosas de la vida, se unió a 𝗝𝘂𝗮𝗻 𝗖𝗮𝗿𝗹𝗼𝘀 𝗢𝗻𝗲𝘁𝘁𝗶 en la jodida empresa del amor.
En medio de la relación, él se casó con otra.
𝗢𝗻𝗲𝘁𝘁𝗶 es visitado por 𝗜𝗱𝗲𝗮 estando hospitalizado. Será la última vez que se vean.
“Me levanté y quise tocarlo, tocar su mejilla con la mía. Apenas llegaba a él cuando me agarró con un vigor desesperado y me besó con el beso más grande, más tremendo que me hayan dado, que me vayan a dar nunca, y apenas comenzó su beso, sollozó, empezó a sollozar por detrás de aquel beso, después del cual debí morirme”.
𝗜𝗱𝗲𝗮 𝗩𝗶𝗹𝗮𝗿𝗶𝗻̃𝗼, escribió un poema titulado 𝐘𝐚 𝐧𝐨.
𝘠𝘢 𝘯𝘰 𝘴𝘦𝘳𝘢́
𝘺𝘢 𝘯𝘰
𝘯𝘰 𝘷𝘪𝘷𝘪𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘫𝘶𝘯𝘵𝘰𝘴
𝘯𝘰 𝘤𝘳𝘪𝘢𝘳𝘦́ 𝘢 𝘵𝘶 𝘩𝘪𝘫𝘰
𝘯𝘰 𝘤𝘰𝘴𝘦𝘳𝘦́ 𝘵𝘶 𝘳𝘰𝘱𝘢
𝘯𝘰 𝘵𝘦 𝘵𝘦𝘯𝘥𝘳𝘦́ 𝘥𝘦 𝘯𝘰𝘤𝘩𝘦
𝘯𝘰 𝘵𝘦 𝘣𝘦𝘴𝘢𝘳𝘦́ 𝘢𝘭 𝘪𝘳𝘮𝘦
𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢 𝘴𝘢𝘣𝘳𝘢́𝘴 𝘲𝘶𝘪𝘦́𝘯 𝘧𝘶𝘪
𝘱𝘰𝘳 𝘲𝘶𝘦́ 𝘮𝘦 𝘢𝘮𝘢𝘳𝘰𝘯 𝘰𝘵𝘳𝘰𝘴.
𝘕𝘰 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘳𝘦́ 𝘢 𝘴𝘢𝘣𝘦𝘳
𝘱𝘰𝘳 𝘲𝘶𝘦́ 𝘯𝘪 𝘤𝘰́𝘮𝘰 𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢
𝘯𝘪 𝘴𝘪 𝘦𝘳𝘢 𝘥𝘦 𝘷𝘦𝘳𝘥𝘢𝘥
𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘥𝘪𝘫𝘪𝘴𝘵𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘳𝘢
𝘯𝘪 𝘲𝘶𝘪𝘦́𝘯 𝘧𝘶𝘪𝘴𝘵𝘦
𝘯𝘪 𝘲𝘶𝘦́ 𝘧𝘶𝘪 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘵𝘪
𝘯𝘪 𝘤𝘰́𝘮𝘰 𝘩𝘶𝘣𝘪𝘦𝘳𝘢 𝘴𝘪𝘥𝘰
𝘷𝘪𝘷𝘪𝘳 𝘫𝘶𝘯𝘵𝘰𝘴
𝘲𝘶𝘦𝘳𝘦𝘳𝘯𝘰𝘴
𝘦𝘴𝘱𝘦𝘳𝘢𝘳𝘯𝘰𝘴
𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳.
𝘠𝘢 𝘯𝘰 𝘴𝘰𝘺 𝘮𝘢́𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘺𝘰
𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦 𝘺 𝘵𝘶́
𝘺𝘢
𝘯𝘰 𝘴𝘦𝘳𝘢́𝘴 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘮𝘪́
𝘮𝘢́𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘶́. 𝘠𝘢 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢́𝘴
𝘦𝘯 𝘶𝘯 𝘥𝘪́𝘢 𝘧𝘶𝘵𝘶𝘳𝘰
𝘯𝘰 𝘴𝘢𝘣𝘳𝘦́ 𝘥𝘰́𝘯𝘥𝘦 𝘷𝘪𝘷𝘦𝘴
𝘤𝘰𝘯 𝘲𝘶𝘪𝘦́𝘯
𝘯𝘪 𝘴𝘪 𝘵𝘦 𝘢𝘤𝘶𝘦𝘳𝘥𝘢𝘴.
𝘕𝘰 𝘮𝘦 𝘢𝘣𝘳𝘢𝘻𝘢𝘳𝘢́𝘴 𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢
𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘦𝘴𝘢 𝘯𝘰𝘤𝘩𝘦
𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢.
𝘕𝘰 𝘷𝘰𝘭𝘷𝘦𝘳𝘦́ 𝘢 𝘵𝘰𝘤𝘢𝘳𝘵𝘦.
𝘕𝘰 𝘵𝘦 𝘷𝘦𝘳𝘦́ 𝘮𝘰𝘳𝘪𝘳.
Duro ¿verdad?
Se que, bajo el árbol, hay una caja con un libro para mi:
𝐏𝐨𝐞𝐬𝐢́𝐚 𝐜𝐨𝐦𝐩𝐥𝐞𝐭𝐚 de 𝗜𝗱𝗲𝗮 𝗩𝗶𝗹𝗮𝗿𝗶𝗻̃𝗼.
Buen día. Buen año. Buena vida. Quiero abrir esa caja.