martes, 22 de julio de 2014

La verdad, nunca parece verdadera



En la construcción del Partenón de Atenas, se utilizaron todo tipo de refinamientos ópticos para "mejorar" su estética.

Las columnas de las esquinas,  son un 2´5 por ciento más gruesas que las centrales. Los fustes de las columnas tampoco son rectos, son más gruesos en el centro (unos 2 cm). 
Los griegos se dieron cuenta de que una superficie amplia y perfectamente plana da la impresión de estar hundida en su parte central. Para evitar este efecto óptico, el estilóbato (la base de las columnas) del Partenón se construyó abombado en el centro. A este efecto se llama éntasis. El centro de los laterales está 11 cm. más alto que las esquinas y en los frontones la altura del centro es 6 cm. mayor que en las esquinas. 


Es decir, las lineas rectas, son curvas... para que parezcan más rectas.
Si se hubieran construido con rectas, lo veríamos curvado.
La verdad, nunca parece verdadera.
Cuéntale una historia cualquiera, a alguien. Si no la retocamos, le parecerá artificial y poco creíble. 
Retócala, y será más autentica que la realidad. 
Todo consiste en ser más verdadero que la realidad.


Leer las noticias hoy. El estado de la Nación. El conflicto Palestino. El paro. La pérdida de confianza; tal vez nos hayan retocado la realidad y sea mejor... de lo que parece.
Platón, Aristóteles y la metafísica... Empezamos bien el día ¿no?

Animo y suerte.

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