Al otro lado del espejo

Viernes.

Tengo un buen amigo, del que aprendo muchas cosas.

Es una de esas amistades, sin compromiso, que no necesita mantenimiento.

La vida, el trabajo o la pura casualidad, hace que coincidamos en más de una ocasión.

Ser consciente de tus limitaciones. Todos tenemos limitaciones.

Asumir, tus miedos. Todos, tenemos miedos.

Aceptar que tu orden de prioridades, cambia a cada minuto; porque cada vez tienes menos tiempo vital.

O darte cuenta de que tu rebelión real, es aceptarte, reconocerte en el espejo.

Con todo lo bueno y malo que hay en tí.

Nunca ganaras una maraton, o nunca participaras en una.

Ser más o menos objetivo, ser más o menos ecuánime o simplemente, ser.

La rebelión, no es contra ese que ves en el espejo.

La rebelión, es a favor de ese; ese que ves con ojeras, con arrugas, con gesto cansado y con pocas ganas de nada.

Ese que debe llenarse de egoismo, para seguir adelante.

Tengo un buen amigo, al que veo todos los días, al otro lado del espejo.

El calor, me afecta.

Animo y suerte.