Domingo.
A veces los detalles, son todo.
Manejar el cuchillo con cuidado, para no cortarse.
Poner los dedo recogidos, un poco más atrás, o un poco más adelante. Solo unos milímetros.
Ese pequeño detalle, marca la diferencia.
Hay quien dice, que hasta que un cuchillo no prueba tu sangre, no eres su propietario.
Decir buenos días, o buenas tardes, al llegar a un sitio. Es un detalle, de educación.
Da igual que nadie conteste. El detalle, tu detalle, importa.
Detalles, que conforman el todo.
Hoy, algo ha habido, algún detalle.
Los donuts de chocolate, habrá que repetirlos.
Seguro que poner más o menos yogur, o más o menos nata, hace que todo cambie.
Aunque también puede haber existido cierta componente de impaciencia.
Los detalles a veces, muestran nuestros errores.
Animo y suerte.
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