Se nos va de las manos...

Si, se nos va de las manos.

El tío Luis, había alcanzado altas cotas de poder.

Llegó incluso a nombrar los Consejeros de un nuevo organismo, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

Esos Consejeros, necesitaban Directores, Subdirectores y personal a tutiplen para dar empaque y que alguien hiciera algo, en ese maravilloso y recién estrenado organismo.

¡Oh, que alegría!, ¡Oh, que alboroto!...

Ya tenemos Directora... Todos gritaban, ¡Beatriz!, ¡Beatriz!. La sobrina de Luis.

Como mola, ser la sobri del Ministro...

Ella, al ver el revuelo que se ha montado, decide dimitir.

Pero, no os preocupéis... la hija de Miguel, está al quite. Micaela, ya era la número dos de Beatriz.

Ehmmm, no, no penséis mal...

Son dos profesionales como la copa de un pino.

No tiene nada que ver, que Beatriz sea sobrina de Luis de Guindos, y que Micaela (que le ha echado valor y acepta ocupar el puesto al que su jefa ha renunciado) es hija del Miguel Arias-Cañete.

Yo siempre oí que la mujer del Cesar no solo debe ser honrada, sino parecerlo.

Mira que sois mal pensados.

¿Ahora resultará que los familiares de los políticos no pueden ocupar cargos de relevancia?

¿Será que dudamos de su honorabilidad, así... sin más?

Tener un familiar político y que además esté en el Gobierno, ¿colocara a todos sus familiares en una situación de desigualdad con respecto al resto de ciudadanos?.

Se nos va de las manos, señores... se nos va.

Me hablan de un jugador de fútbol. 

Un delantero portugués  al que el beneficio se le acaba el 1º de enero de 2014. 

Si se queda en España, tendrá que empezar a pagar a la Hacienda Pública el 56% de sus ganancias. De su salario y de sus derechos de imagen. 

Hasta ahora, lo que embolsa por promocionar desde shampoo hasta servicios bancarios está libre de impuestos en España. Nunca se publicó dónde ingresa esos fondos, pero sería lógico pensar que lo hace en su tierra natal: la isla de Madeira, un paraíso fiscal dentro de Portugal. (Martin Rodriguez Yebra)

Hay otro, que visita los juzgados y es aclamado por la multitud mientras el Juez lo espera para acusarlo de fraude fiscal.

Ha devuelto ya 15 millones de euros.

“De la plata se ocupa mi papá”, dice.

Que no hará un padre por un hijo... o por una hija. ¿Verdad, Cañete?

Animo y suerte.