sábado, 7 de noviembre de 2020

Bailar con el viento



Sábado.

Sigue lloviendo. He descansado bien.
Por decirlo fácil. Me siento bien, muy bien, de la ostia.
Quitando el peso de los años, y el de los mocos, no puedo estar mejor.
Un café o dos, leer las noticias.
Un buen amigo, me recuerda una canción y me invita a bailar con el viento.
Y no quiero más desastres
De horror en todas partes
Esta parte no la quiero para mí
Me pongo a cubierto, apretando bien los dientes
Para no escupir palabras
Para no perder la calma, intento largarme de aquí
Paso la mirada por las noticias. Donald (el pato no, el otro) cada vez con menos posibilidades, pero será largo, muy largo.
El #putovirus y la quinta variante de los visones.
Heridas emocionales abiertas.
Colapso de la ideología neoliberal.
Isi araña la puerta, es tarde. Quiere salir, necesita salir. Llueve.
La entretengo con un corrusquillo de pan duro como desayuno.
Me mira, la miro. Es inquieta, joven. Me lame los dedos y busca la manera de subirse a mis piernas para ver lo que hago. Inquieta, joven y grande.
Sonrío mientras veo y escucho el video de una nueva canción. Blanki me dijo algo sobre élla. Si, los pendientes.
Yo me creía que еra el más cabrón
Pero me еstoy notando el corazón (Dale, dale)
Estás apretando mucho, mami, déjalo (Eso e’)
Si quieres te doy la razón (Ala)
Yo lo único que quiero es largarme de aquí (Oh)
Me da igual dónde, puedes elegir (Dale)
Algún día, dentro de poco me vi’a arrepentir
De haberte confesa’o lo que me hace sufrir
Toma que toma
Cierro los ojos. Largarme de aquí.
Si, Isi, me pongo el chubasquero y salimos.
Animo y suerte.
Fragmento de "Bailando con el viento". Alis
Fragmento de "Tú me dejaste de querer". C Tangana.

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