martes, 13 de octubre de 2020

Esto



Martes.
Ayer, en mi escueto saludo, alguien escribió:
Buenos días. Hay esperanza?
La RAE la define como: 
«Estado de ánimo que surge cuando se presenta como alcanzable lo que se desea»
Tal vez, la persona que escribió la pregunta debería haber detallado cual es el objeto de su deseo o qué es lo que pretende alcanzar.
Seguramente, y esa fue mi suposición, se refería a "esto", a este saco de situaciones con las que convivimos de una manera más o menos cercana y a como nos están afectando.
Dificil, muy dificil contestar.
He pasado por muchas fases emocionales y psicológicas desde el pasado marzo.
Confié que "esto" nos haría ser mejores (¿era esperanza?), tal vez porque ví elementos de mejora en mi mismo.
No, no fué así. Incluso, "esto", también sacó lo peor de mí. Odié, odié profundamente.
Dicen que "la esperanza es lo último que se pierde". También habrás oído, "mientras haya vida hay esperanza". Es un elemento motivador, una emoción, un estado mental.
Sinceramente, no lo sé. No se si hay esperanza.
¿En que "esto" mejore?. ¿En que sepamos entendernos? ¿Llegar a acuerdos?
Los signos que percibimos a nuestro alrededor no nos dicen que estemos cerca de "alcanzar" lo que deseamos.
Seguramente, quien preguntaba, tiene motivos y valores (como tu y como yo) que "esto" ha puesto en duda, y claro, la palabra talismán, le ha creado incertidumbre.
Dicen que la esperanza debe ser proporcional a la importancia del objetivo a conseguir y a la dificultad para conseguirlo.
Pero esos objetivos, esos deseos, deben ser personales y realistas. No impuestos. Y tampoco deben ser algo que la persona crea que está obligada a cumplir.
No, amigo, no tengo esperanza global. No tengo esperanza sobre esta sociedad, sobre esta humanidad.
Creo en mi plan. Ese que me fija objetivos,  que mira al futuro, que me reta cada día para que siga adelante. Que hace que cada amanecer me parezca un logro.
Mi plan, tu plan, el de muchos otros, puede ir construyendo un futuro distinto. Eso, sí puede construir esperanza.
Hemos abierto una nueva caja de Pandora, que se parece mucho a la original. Aquella que, al abrirla, extendió todos los males sobre la tierra. Y ¿sabes?, en el fondo de la caja, quedó la esperanza.
Habrá que mirar dentro, en el fondo.
Animo y suerte.

 
#yocontigo #100cafesconunputovirus #uncafealamanecer
#lavidaenunataza
#AcuerdatedeVIVIR

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