miércoles, 8 de diciembre de 2021

Gardel


Esta semana llevo un poco de lío. Los festivos, no festivos, me complican la gestión.
No tenía previsto pasar este puente en Madrid y todo lo que ocurre es "imprevisto".
Por un lado, muy bien, pero por otro me siento en el vértice de algo sin tener muy claro hacia que lado caer.
Hay momentos de no hacer nada, que también es hacer algo, porque acabo poniéndome a pensar.
Me agoto leyendo estupideces (o a mi me lo parecen), aunque intento no malmeterme por dentro.
El numero de Ministros es tema de discusión. Si Suarez levantara la cabeza, se reiría. El, tuvo más.
Otro número, el de los contagios. Con test, sin test, con vacuna o sin ella, el número sube.
Hablo con Oksana sobre su país, Ucrania. No ha aprendido mucho español. Ella es amable, sonriente educada y su "si sinyor" me hace sonreír. Se va a pasar la Navidad con su familia. Le pregunto sobre como está el tema con Rusia, y entre varios "sinyor" y frases cortas, consigo entender que mal, que muy mal.
- Ucrania, trabajo, tierra buena sinyor (Mientras pilla un puñadito de una de las plantas de la cocina). Rusos solo (hace el gesto típico de beber) sinyor.
No le pregunto por lo de Crimea, ni como su ejercito ha crecido de 5000 a casi 1,3 millones de soldados. No le hablo de los separatistas prorusos, ni de lo mal que lo pasé en aquel aeropuerto un día de agosto de 1991.
Intento saber cual es el motivo de que Rusia quiera invadir Ucrania.
Un país con una renta per cápita muy baja, una tasa de pobreza casi tan alta como la de corrupción. Pero con tierra de cultivo, cereales.
Aparece Isi, dando saltos como un caballito y va directa a saludar a Oksana. Hace días que no se ven. Ahí se acaba el problema de Ucrania y Rusia, solo mimos, lametones y ese "Iiiiisi bonyta" con acento Ucraniano.
Tal vez, Biden "ese señor" y Putin "el otro", deberían conocer a Isi.
Anoto frases. Gulag, cabaña, yesca. Unos viven encerrados en la cabaña y pasan su vida golpeando la yesca para hacer fuego y calentarse. Otros, buscan que la cabaña arda, para ser libres.
Correos por contestar, dos propuestas con temas de trabajo pendientes. Y la semana se me hace larga, y la vida corta.
Y me viene un tango a la cabeza.
𝑽𝒐𝒍𝒗𝒆𝒓
𝑪𝒐𝒏 𝒍𝒂 𝒇𝒓𝒆𝒏𝒕𝒆 𝒎𝒂𝒓𝒄𝒉𝒊𝒕𝒂
𝑳𝒂𝒔 𝒏𝒊𝒆𝒗𝒆𝒔 𝒅𝒆𝒍 𝒕𝒊𝒆𝒎𝒑𝒐 𝒑𝒍𝒂𝒕𝒆𝒂𝒓𝒐𝒏 𝒎𝒊 𝒔𝒊𝒆𝒏
𝑺𝒆𝒏𝒕𝒊𝒓
𝑸𝒖𝒆 𝒆𝒔 𝒖𝒏 𝒔𝒐𝒑𝒍𝒐 𝒍𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂
𝑸𝒖𝒆 𝒗𝒆𝒊𝒏𝒕𝒆 𝒂𝒏̃𝒐𝒔 𝒏𝒐 𝒆𝒔 𝒏𝒂𝒅𝒂
𝑸𝒖𝒆 𝒇𝒆𝒃𝒓𝒊𝒍 𝒍𝒂 𝒎𝒊𝒓𝒂𝒅𝒂
𝑬𝒓𝒓𝒂𝒏𝒕𝒆 𝒆𝒏 𝒍𝒂𝒔 𝒔𝒐𝒎𝒃𝒓𝒂𝒔, 𝒕𝒆 𝒃𝒖𝒔𝒄𝒂 𝒚 𝒕𝒆 𝒏𝒐𝒎𝒃𝒓𝒂
𝑽𝒊𝒗𝒊𝒓
𝑪𝒐𝒏 𝒆𝒍 𝒂𝒍𝒎𝒂 𝒂𝒇𝒆𝒓𝒓𝒂𝒅𝒂
𝑨 𝒖𝒏 𝒅𝒖𝒍𝒄𝒆 𝒓𝒆𝒄𝒖𝒆𝒓𝒅𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒍𝒍𝒐𝒓𝒐 𝒐𝒕𝒓𝒂 𝒗𝒆𝒛
El próximo día que venga Oksana le pregunto por Gardel.
Que corta se me hace la vida.
Animo y suerte.
*Regala libros. 😉

No hay comentarios:

Publicar un comentario